La edad de piedra dió paso a la
de cobre, ésta a la de hierro, y así, sucesivamente, los avances tecnológicos han
cambiado la historia de la humanidad y el hidrógeno se está perfilando.
No cabe la menor duda que actualmente nos encontramos en un momento decisivo, en el que es indispensable disponer de nuevas tecnologías que den soluciones a los problemas que la sociedad actual sufre. Uno de los mayores es lograr fuentes de energía sostenibles y limpias, y de un vector energético que permita disponer de dicha energía de forma flexible y práctica.
La mejor fuente de energía que tendríamos que aprovechar es la que proviene del sol, y el vector energético que mejor respondería a las necesidades de a la sociedad actual sería el hidrógeno. La combinación de este elemento con el oxígeno da lugar a una gran cantidad de energía, siendo agua el producto resultante. Por lo tanto, si se desarrollara un proceso para obtener hidrógeno del agua mediante energía solar, se cerraría el ciclo constituyendo un sistema altamente virtuoso.